martes, 15 de septiembre de 2015

Recuerdo...

Recuerdo

Recuerdo aquella primera vez en que aparecí en tus sueños...
Recuerdo ese caminar a ojos cerrados, confiando plenamente en la compañía del otro...
Recuerdo esa vez que te soñé abrazada a mi cuerpo, unida en un deseo de amor...
Recuerdo aquel primer abrazo sorpresivo y lleno de lágrimas y de emociones nacientes...
Recuerdo aquellas conversaciones interminables, que duraban hasta el ocaso de la noche y que me hacían vibrar el cuerpo de pura emoción...
Recuerdo las noches oscuras en una banca desierta, donde cada palabra, mirada y roce eran indicio de una complicidad...
Recuerdo el contacto ínfimo de nuestros pies en aquellas maravillosas instancias inspiradoras, tan intencionales y tan disimulados que eran...
Recuerdo cuando nació de mí uno de los primeros escritos que con tanta pasión te lo canté, porque tú eras la musa de mi inspiración...
Recuerdo aquella noche en que te profesé mi incipiente amor y te dediqué las palabras que hoy me penan: "eterno amor imposible"...
Recuerdo aquellas coincidencias cotidianas... ese asombro por lo parecido de nuestra forma de ser...
Recuerdo noches estrelladas, frías, eternas y de ensueño... noches en que la vida se hizo presente en mi cuerpo...
Recuerdo aquella obra, aquel miedo en conjunto, aquella magia tan sabrosa y tan dulce que gocé entre penumbras...
Recuerdo sueños de viajes a parajes desconocidos, cuerpos desnudos danzantes en bosques iluminados por la luz de la luna...
Recuerdo momentos tristes... lágrimas caídas y luego fulgor entre las sombras...
Recuerdo cada beso, cada abrazo, cada mirada y cada vez que nos entregamos en el acto del amor como un regalo de la vida...
Recuerdo tanto, que no me cabe en las palabras...
Y no entiendo cómo solo yo lo viví de esta forma...

Tengo miedo... de que tu memoria no recuerde como yo, de que no desees que aquellos recuerdos vuelvan a ser vividos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario