viernes, 2 de octubre de 2015

Viento primaveral 6

Me preguntas
pero tú misma
quisiste que
no te entregara mi amor.

Y lo que siento,
cuando ya la cordillera,
no se ve,
y la noche,
de nuevo ha tocado
con su oscuridad,
todo lugar.

Ha tocado mi corazón
hundido en la pena,
cada vez que te huelo, que te veo
una angustia profunda aparece en mi vientre,
es la sinceridad del amor.

No te odio,
aunque debería.
Te amo,
como nunca había amado.

Y no te preocupes
por lo que mi boca promulga
porque es producto de la sinceridad instantánea,
del sucedáneo del alcohol.

No hay comentarios:

Publicar un comentario